Todos hemos oído alguna vez de la ley de la oferta y la demanda, que es la que determina los precios.
Esta ley, que es realmente la base de la economía de mercado tiene un trasfondo muy complejo, en el que entran en juego muchísimos elementos como son por ejemplo:
- Costos de producción
 - Competencia
 - Información
 - Preferencias del consumidor
 - Especulación
 
Cada uno de esos temas da para escribir un libro solamente para explicar lo mas básico, pero hoy me voy a concentrar en el último tema por dos razones, la primera es llamémoslo una defensa de los especuladores y la segunda es explicar como es una oportunidad de generación de riqueza.
El economista Adam Smith propuso lo que llamo la mano invisible, que es una fuerza que lleva los mercados al equilibro. La mano invisible tiene un nombre: Especulador
Voy a hacer una diferenciación semántica y moral entre especulador y acaparador: El especulador es quien hace una apuesta al futuro, compromete su capital ante unas expectativas de disponibilidad (y por lo tanto precio) Se puede especular en dos direcciones, abundancia y escasez.
Cuando se especula suponiendo la abundancia lo que se hace es tratar de garantizar el precio de venta y los mercados a donde vender.
Cuando se especula suponiendo la escasez, la persona sea asegura de la disponibilidad, ya sea comprando el producto en cantidades importantes o haciendo contratos de aprovisionamiento. Aquí es donde el límite con el acaparador se vuelve difuso.
Un acaparador, generalmente ya opera cuando hay escasez del producto y lo que hace es reunir la mayor cantidad que pueda del producto para venderlo con sobreprecios.
Voy a hacer una anotación política aca. Muchas de las oportunidades de acaparamiento surgen de los mismos gobiernos que fomentan imperfecciones en los mercados, los cierres de importación, los subsidios, los límites de precios son generalmente la mejor fuente para que los acaparadores actúen. Cuando un producto escasea y el gobierno facilita su importación, mantiene libre el precio, no da subsidios, el mercado tiende a reaccionar con especulación pero sin acaparamiento para ajustarse.
Pongamos un ejemplo a esto último. Supongamos que el arroz, que es un producto de primera necesidad en casi todo el mundo tiene un período de escasez en un mercado. ¿Cuales pueden ser las causas?
- Una mala cosecha
 - Restricciones en el precio máximo, que hacen que para un grupo de productores de alto costo no sea rentable producirlo y venderlo o que sea más rentable enviarlo a otros mercados. (Se fomenta el contrabando hacia mercados extranjeros)
 - Restricciones a la importación (y exportación) del producto, que quitan flexibilidad al mercado, limitando el aprovisionamiento en épocas de escasez y aumentando los costos en épocas de abundancia.
 - Subsidios, que además de desangrar el tesoro, aumentan la demanda por encima de la que es económicamente factible. Normalmente estos subsidios son a los productores nacionales, lo cual se traduce en que no hay incentivo para la eficiencia y que no sea factible ofrecer producto de otro país
 
¿Que hace el especulador? El, al darse cuenta que hay una oportunidad de arbitrar entre un mercado externo de menor precio, y uno interno de mayor precio se encargará de movilizar sus recursos para traer el producto y obtener ganancia, eso no solo es lícito es realmente la función social del especulador, y lo que garantiza que el producto se acerque al precio de equilibrio.
¿Qué hace el acaparador? Para el acaparador, la escasez es el beneficio, no esta interesado en aumentar la oferta, sino por el contrario en reducirla “racionando” las cantidades que se colocan en el mercado. Busca comprar lo máximo posible, para obligar al precio a subir y obtener la mayor ganancia.
El acaparador se acaba cuando el mercado tiene los grados de libertad que permiten el ajuste por medio de:
- Reducción del consumo “superfluo” (que no se daría al precio de mercado)
 - Aumento automático de la oferta (por importaciones o por ingreso al mercado de productores de mas alto costo a los que el precio les cubre sus costos)
 
Debo hacer una salvedad. Excepcionalmente la escasez no es superable, y el racionamiento es inevitable aun para los gobiernos, como por ejemplo en la crisis del petróleo de los 70 cuando los productores acapararon su producto para presionar el precio. O cuando hay escasez mundial del producto. En condiciones de guerra cuando para el país es imposible aprovisionarse. En esos casos excepcionales es perfectamente lícito perseguir a los acaparadores. En otros casos lo más razonable es permitir la operación del mercado para que se ajuste con los mecanismos descritos, que automáticamente sacan del juego a los acaparadores. (Incluso con el solo anuncio de importaciones y apertura los acaparadores desisten porque pueden terminar quedándose con inventarios)
Decía al comienzo que había dos razones para hablar de especulación, la primera ya la revisamos y es la función social del especulador, o sea ayudar al ajuste de los mercados.
Esta función social es totalmente egoísta, el especulador no lo hace por una razón filantrópica, el lo hace porque estas acciones le dan una utilidad.
Quienes se oponen a la economía de mercado, generalmente los comunistas y ciertas razas de socialistas ven con malos ojos las utilidades, y mas aun las utilidades extraordinarias.
La especulación se hace para obtener utilidades y no es raro que se obtengan utilidades extraordinarias. Un ejemplo es la especulación con futuros.
El primer caso de especulación con futuros documentado es la historia del filósofo Tales de Mileto, quien en una ocasión observo que habría una abundante cosecha de olivo, y anticipándose a todos contrato todos los molinos para la extracción del aceite. Cuando llego la cosecha hizo una excelente utilidad al tener el monopolio temporal de esos molinos y poder cobrar las tarifas más altas.
Hoy en día la especulación con futuros es pan de da cada día, las bolsas de commodities permiten a cualquier persona con algo de capital hacer contratos con opciones de compra o venta de productos y especular con el precio de productos como trigo, jugo de naranja, tocino, algodón, petróleo, y un largo etcétera.
Ahora, no todo es color de rosa, la especulación es un negocio altamente riesgoso. Las cosas pueden salir mal, muy mal y en lugar de una altísima ganancia se pueden lograr perdidas del mismo calibre.
Si yo por ejemplo apuesto a que el petróleo, que hoy esta a 65 dólares por barril estará el mes próximo a 80 dólares, y hago un contrato para comprar el petróleo a 70 dólares, y el petróleo en lugar de subir hacia los 80 se mantiene o incluso baja de precio, todo lo que invertí en mi contrato se pierde.
Perdí mi plata porque en Nigeria se pusieron de acuerdo todos, porque se encontraron yacimientos en la china y dejaron de importar petróleo, porque Chávez renuncio al poder y Venezuela endeudada decide exportar mas para cubrir su deuda. Son apuestas riesgosas y por eso siempre se habla de que la rentabilidad esta asociada con el riesgo.
Ahora, el riesgo también esta en el conocimiento, especular en mercados desconocidos es perder la plata casi sobre seguro. Por ejemplo participar en el mercado de futuros sin conocer cuales son los factores que inciden en el precio no permite evaluar como pueden influir en el precio final.
Si bien solo algunos lo hacen, se puede evaluar y darle ponderación a los elementos del precio del producto, cuantos productores hay, cuanto pueden producir, cual es su probabilidad de aumento o reducción (condiciones políticas, climáticas, técnicas pueden medirse) Los consumidores, cuanto están consumiendo, y cual es su probabilidad de aumento o reducción en el consumo (condiciones económicas, políticas y sociales pueden aumentar o reducir el consumo) Este conocimiento del mercado permite que la apuesta no sea a ciegas y que haya una buena probabilidad de éxito en la especulación.
Un amigo judío (Martin Kisner Q.E.P.D.) era comerciante en telas y una vez le ofrecieron una superoferta, un lote a poco menos de mitad de precio, el le pareció una excelente oportunidad e invirtió una buena cantidad. Lo que el no supo es que la misma oferta se la habían dado a muchos comerciantes mas, quienes también habían aceptado, el resultado es que todos terminaron quedándose con su lote de tela durante mucho mas tiempo porque todos salieron al mercado a ofrecer lo mismo, y no había clientes finales para eso.
Se me olvidaba, hoy se habla de la sociedad de información, y pues la especulación es el negocio de la información. Si sabes algo que nadie más sabe, puedes especular y ganar, pero si no sabes algo que alguien si, pues lo siento amigo, la platica se va.
Dentro de la especulación, hay una parte que no es lícita y es cuando a una persona se le confía una información en función de su trabajo y la utiliza para beneficio propio. Esto es particularmente nocivo cuando son los empleados públicos quienes usufructúan y especulan con por ejemplo las tierras requeridas para una obra pública.